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El enfermero accidentado iniciará acciones civiles y manifestó falta de solidaridad de sus compañeros

Jorge Castillo muestra el gran hematoma de donde salen muchos dolores internos. Foto Miguel Velazquez

Sierra Grande.- Dolido por dentro  y por fuera. Así  está el enfermero Jorge Castillo que hace exactamente una semana sufrió un accidente en la ruta 3 cuando con sus compañeros trasladaban a una paciente desde Roca  a Sierra Grande. Se siente abandonado y hará acciones legales.

El accidente ocurrió el 2 de abril, fue muy cerca de Sierra Grande, la ambulancia del hospital Dr Osvaldo Pablo Bianchi, sufrió un reventón y dio la parte trasera contra el guard raid. De milagro la ambulancia no volcó, pero en su interior castillo llevó la peor parte. Viajaban además dos choferes, un médico, una paciente y su esposo

“Venía en la parte de atrás con el Dr Barrionuevo y con la paciente y en el  momento del impacto me sacudió contra todo, contra las paredes de la ambulancia  y quedé muy golpeado”, narró Castillo a Pido La Palabra.  .

Las puertas del rodado quedaron trabadas y tuvieron que hacer peripecias para destrabarlas y sacar a la paciente y ponerla a salvo.

“Yo no podía respirar, sentí mucho dolor la parte toráxica, y tenía hematomas por todos lados y uno mas grande cerca del corazón”, acotó.

Castillo quedó internado por los hematomas pero ya pasó una semana y no sabe que es lo que tiene y lo mas triste siente que sus mismos compañeros lo dejaron solo.

“No saben  que tengo”, señaló el enfermero desde la sala 13 del hospital, por eso reclamaba que le hagan una tomografía pero recién se enteró que no estaba el pedido cuando él llamó directamente a la ART y ahí lo escucharon y le prometieron que sería autorizada y así fue, “me vi en la obligación de reclamar”, dijo.

El lunes fue trasladado a Viedma y le hicieron la tomografía pero sin resultados aún , que en estas horas tendrá en sus manos el Dr Manzanelli, que lo asiste.

Los dolores son cada vez mas fuertes y las radiografías no manifiestan fracturas a la vista pero mas allá del dolor físico  siente poca solidaridad de sus compañeros.  “No vino nadie, excepto los médicos que me han atendido,  el resto no vino nadie ni a preguntar si necesito algo”, expresó.

Castillo agregó que “no estoy así porque lo quise, los dolores los tengo  y nadie me dice nada, quiero  ver los resultados de los estudios para haber si hay algo.

Por esta situación  ya puso el caso en manos de abogados para iniciar acciones “primero mi recuperación y ver que tengo y luego voy a hacer una acción civil por cosas que pasaron desde el principio en el viaje, es lo que haría cualquier persona”, expresó sin precisar detalles.

“Si bien somos compañeros tendrían que ponerse en el zapato del otro ni la directora se acercó, yo necesitaba hacer los papeles y que me den una mano, cada uno sabe lo que hace no te dan bolilla.

“Me hacen sentir culpable, vinieron a querer hablar del accidente peor me negué, ya está, agradezco a la gente que me apoyó”.

 

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