Sierra Grande | La situación de las calles en Sierra Grande se ha vuelto insostenible. El asfalto deteriorado, los baches profundos y los escasos recursos para el mantenimiento forman parte de un paisaje urbano que empeora con cada lluvia. La última precipitación registrada la semana pasada dejó al descubierto el dramático estado en que se encuentran muchas arterias de la ciudad.
Uno de los ejemplos más visibles se dio en la calle Bahía Blanca. Allí, el pasado viernes por la tarde, los miembros de una familia decidieron tomar cartas en el asunto y, palas en mano, prepararon mezcla para tapar los pozos que se habían formado frente a su vivienda. El gesto evidencia el cansancio y la frustración de los vecinos frente a la demanda continua.
Desde la Municipalidad de Sierra Grande se realizan arreglos, pero resultan insuficientes ante la magnitud del problema. La cantidad de pozos crece más rápido que las soluciones que se pueden implementar, generando malestar entre los conductores y peatones, y afectando la transitabilidad en varios puntos de la ciudad.
A esta preocupación vecinal se sumó un aviso de la Policía de Río Negro, el viernes por la mañana. Desde la fuerza y de manera urgente, efectivos de la fuerza alertaron sobre una rotura considerable en la calle Viedma y llegando a la colectora, cuya peligrosidad aumentó debido al tamaño del pozo. En rigor, toda la cuadra en donde se alertó sobre la rotura se encuentra intransitable.
Por su parte, en diálogo con Radio Libre, el secretario de Obras, Planeamiento y Urbanismo, Maximiliano Ruiz, se refirió al estado de las calles y las medidas tomadas para su mantenimiento. Ruiz explicó que, ante la imposibilidad de utilizar la maquinaria municipal debido a una falla sufrida en el balneario, se procedió a la contratación de una máquina externa para garantizar el repaso de calles en distintos barrios como La Loma, las zonas A, D y F de la villa, el barrio Chino e Industrial. “Estamos trabajando en poner en condiciones la máquina municipal, que sigue en reparación. Mientras tanto, avanzamos con una máquina contratada para cubrir la demanda”, señaló.
Asimismo, reconoció que muchos sectores presentan una notoria falta de relleno, lo que genera problemas serios de transitabilidad, especialmente luego de las lluvias. “Vamos a hacer un acopio de material calcáreo y volver a repasar los puntos críticos, donde incluso las tapas de cloaca quedaron por encima del nivel de la calle. Queremos nivelar y rellenar correctamente”, explicó.
El estado de las calles se va convirtiendo con el correr de los días en un problema de seguridad y en una demanda urgente que supera las posibilidades de resolución, requiere de respuestas integrales y sostenidas.