Sierra Grande.- La policía de Playas Doradas cumple tareas en el inicio de la ruta provincial 5 que une Sierra Grande con la villa balnearia, sin embargo el tránsito es constante y los efectivos todo el tiempo mandan personas a su casa.
En los escasos 15 minutos que este medio estuvo en el lugar pasaron cinco autos, incluso turistas de la provincia de Buenos Aires estaban dejando la zona.
«La gente no entiende, ya mandé a varios a las casas que andan con los nenes en el auto y todos tiene una excusa diferente», señaló la policía que cumplía tareas en ese momento que adelantó que a la segunda pasada se notificaría a las personas.
Justo en ese momento un vecino se acercó y les llevó una fresca agua saborizada que venía bien para los 30 grados que había sobre el asfalto.