Sierra Grande.- Una tensa situación se vivió este mediodía en el despacho del intendente de Sierra Grande Renzo Tamburrini cuando manifestantes de ATE, oriundos de Viedma ingresaron al despacho del mandatario.
Desde hace dos días ATE Sierra Grande lleva adelante protestas, paro y movilizaciones por el reclamo del adelantamiento de las paritarias para que se discuta un aumento salarial.
La protesta se centra en el obrador municipal, donde incluso acamparon en estos días, la protesta también se centró en el edificio municipal donde el martes dirigentes de ATE, tuvieron una reunión con el intendente Renzo Tamburrini que les adelantó que no iba a adelantar las paritarias, que esperaría al mes de octubre como inicialmente se había acordado.
Este miércoles a la mañana ATE Sierra Grande, que conduce Alicia Huencho recibió la presencia de una veintena de dirigentes de ATE de Viedma que arribaron para acompañar la protesta.
Hubo una marcha temprano al Concejo Municipal donde fueron recibidos por el Presidente del Concejo Mauro Tamburrini que les anticipó que intercedería con su hermano, el intendente de la localidad, para que haya diálogo.
La protesta se trasladó al edificio municipal, donde los ánimos se caldearon con la presencia de tres muchachos que habrían ingresado de manera poco amigable y dicho que eran de la UOCRA según detalló a este medio Alicia Huencho .
Rápidamente el titular del sindicato, Jorge Pazos se desprendió de esa situación, en ese momento el dirigente participaba de una protesta por el agua en ARSA y mas tarde emitió un comunicado con la desmentida.
La temperatura iba en aumento al punto que una trabajadora municipal tuvo que ser llevada al hospital con un ataque de pánico. Un trabajador de prensa, del Video cable Sierra Grande fue retirado a empujones del interior del despacho por dirigentes de ATE.
Los ánimos se caldearon al punto que los manifestantes de ATE Viedma subieron a la segunda planta e irrumpieron en el despacho del intendente, tiraron papeles, carpetas, expedientes, tocaron el bombo y le gritaron con un megáfono al oído del mandatario.
Rápidamente hubo muestras de acompañamiento al intendente y de repudio por esta situación vivida.