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Apareció Cachiche: su esposa contó que «caminó 160 km atrás de sus chivas»

Cachciche apareció en un campo cerca de Los Berros, caminó 160 km, sus pies cansados y lastimados son el fiel reflejo de su andanza. Foto Cortesía

Sierra Grande.- “Se fue atrás de sus chivas y las encontró”, señaló Cristina Soto luego de recibir el llamado telefónico que esperó durante tres días que le informaba que habían encontrado a su esposo Juan Carlos «Cachiche» Díaz de 68 años.

“Me dijo que estaba bien, dolorido en los pies de tanto caminar, estaba con sus dos perros, caminó casi 16 km”, narró la mujer a Pido la Palabra,  minutos después de conocer la noticia que les devolvió el alma al cuerpo.

Fueron tres días de intensa búsqueda, desde el sábado a la noche en el momento en que se hizo la denuncia en la comisaría 13 de Sierra Grande.

El domingo temprano se activó la búsqueda con policías, bomberos, familiares  en los campos cercanos a la zona de Sierra Grande, es que las últimas novedades las tuvieron de campo de Camelo Morón, donde se quedó el viernes, ya sin boina y sin cuchillo, con los pies heridos, pero el sábado temprano decidió seguir a pie en búsqueda de sus chivas.

Este lunes, cerca de las 20 su esposa, Cristina Soto, recibió la noticia que esperaba,  Cachiche estaba a salvo en un campo cerca de Los Berros. a todo esto había sido un día agotador donde se sumaron los gauchos de Sierra Grande a caballo a rastrear el campo donde lo vieron por última vez.

Apareció en un campo  a unos 160 kilómetros de Sierra Grande en el campo de Daniel Cardozo, que le avisó que lo estaban buscando.

Soto habló con Cachiche una vez que fue trasladado a Los Berros  y le explicó que estaba bien con dolores en las piernas “de tanto caminar”, que estaba con los dos perros con los que había desaparecido y con las 16 chivas.

«Se fue detrás de sus chivas y las encontró», señaló la esposa que está muy agradecida con todos aquellos que han colaborado con la búsqueda, policías , bomberos, familia y  especialmente con la gente de campo de Sierra Grande que puso sus caballos y su tiempos y sus combustibles para buscarlo.

Una vez conocida la noticia sus hijos Silvia y Roberto que participaron de la búsqueda,   lo fueron a buscar al paraje rural. Su nieto Bruno, confiaba en que todo iba a salir bien «conoce todos los campos y susu perros fieles no lo iban a dejar». Afortunadamente ese pronóstico fue bueno. 

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